Al momento de tratar con personas en el día a día nos topamos con muchas entidades diferentes. Partiendo del hecho de que cada persona es un mundo, tenemos que aprender a comunicarnos con cada uno de ellos teniendo en cuenta ciertas normas de convivencia como paciencia y empatía, así como esperamos que entiendan nuestras necesidades.
Ahora bien, en la casa, universidad, empresa, incluso en la calle, encontramos gente distinta, desde su educación, en su desarrollo, etc., es así como nunca sabremos exactamente como van a reaccionar ante nuestras actitudes; pero podemos intuir o buscar una actitud favorable en ellas pero eso es otra cosa.
Cuando se estudia psicología, filosofía y otras ciencias relacionadas con el hombre podemos comprender que aquello que es algo normal para unos, para otros es algo tan diferente, insultante, "raro", y viceversa.
En ocasiones, buscamos alejarnos de esas personas y las situaciones asociadas con ellos, pues es mejor vivir en paz; pero hay momentos en donde esa ya no es la solución.